En una pequeña ciudad pero gran pueblo de la ribera Navarra vivía..... Bueno iré al grano;
Creo que es la segunda vez que escribo algo 'informativo' la otra vez contaba como me habia ido en los cuatro años que llevo en Pamplona, esta vez es para contaros algo sobre mi corta y gratificante vida de 'escritora', además creo que hoy es el día, en el que ya empezaré a firmar con mi nombre.
-Por un lado os cuento, ayer tuve la GRAN (en mayúsculas) suerte de que me invitaran a leer mis poesías delante de un grupo de GRANDES artistas y un público, después de leerlas, me las criticaron para bien y para mal, me comentaron que estaban bien escritas, pero que las había leído sin sentimiento y quizás rápido, que les faltaba ritmo, pero que muy bonitas y emocionantes, a lo que quiero llegar, es que después de escuchar también sus poesías, me invitaron a unirme a su grupo de 'poetas', el grupo forma parte del Ateneo Navarro, y ahora yo estoy encantada de pertenecer a ese grupo, nos juntaremos los miércoles y leeremos cada uno nuestras poesías para luego criticarlas para mejorarlas.
-Por otro lado tengo entre manos mi primera novela, sí señor, novela, ya voy por el tercer capítulo y cada vez me estoy enganchando más a escribirla, estoy aprendiendo un montón ya que estoy teniendo que investigar para que lo que cuento suene real además de bonito.
-Además tengo un par de cuentos para niños ya redactados y testeados por mi prima pequeña con un aprobado, que tengo intención de mandar a alguna editorial a ver si hay suerte. Hace poco estuve 'buscándome' en internet, y apareció algún cuento para niños que colgé gratuitamente no hace mucho, y me sorprendió ver que la gente los había comentado, hay niños que lo último que escuchan antes de dormir es mi cuento, y además a las madres o padres que se los leen les encantan. Uno de mis sueños siempre había sido subirme a un escenario, y que alguien aplaudiera algo que yo sería capaz de hacer, bien pues, creo que esto es mucho mejor que eso (se me acelera el corazón).
-También contaros que por todo esto me ha apuntado a un curso de 'creación literaria', creo que para pertenecer al Ateneo Navarro, escribir una novela, escribir cuentos pequeños y alguna poesía, no sólo me hacen falta palabras bonitas, si no también mucha teoría que no tengo.
-Y creo que esto ya es lo último, hace poquito (la de contidad de cosas que pueden pasar en poco tiempo) tuve la suerte de que una editorial se ofreciera a vender algunos de mis cuentos (estos si de tres o cuatro paginas) por internet, ¡y oye! que incluso alguien los ha comprado. Estoy treméndamente contenta.
Finalizando, decir que a causa de tanta cosa, es probable que quizás escriba menos por este blog, pero eso si cada palabra que escriba será más bonita y con más técnica y con más ritmo que la anterior. Lo que haré será cada poema que lleve semanal a mi grupo de los poetas de los 'Miércoles' lo colgaré aqui corregido. Cada vez esto de escribir me atrae más, es otro gran vicio, la novela que escribo, quiero saber como va a avanzar, por eso cuando empiezo a escribir me engancho de tal manera que se me pasan las horas, y luego claro, me quejo de que duermo poco... pero bueno, siempre consideré que dormir era perder el tiempo.
Así que sólo agradeceros a todos los que leeis este blog, también estoy muy orgullosa de saber que hay gente que lo lee y que luego me digáis lo que os gusta o no os gusta (se aprende más de las críticas malas que de las buenas), así que hasta la próxima entrada y MUCHAS GRACIAS.
Beatriz Torrecilla Fernández
(una ingenua soñadora inconformista)
arde corazón
Por la carretera entre tinieblas,
divisando ríos congelados.
Por los campos abandonados,
contemplando pequeñas flores.
Por montones de corazones que he andado,
alguno incluso he escuchado latir.
Por miles de sonrisas que he dibujado,
alguna incluso se contagio a la mía.
Por miles de personas que he conocido,
sólo unas cuantas, que no son pocas,
han mirado más allá de unos ojos
vacíos de brillo,
y como fuente de agua en desierto,
rayo de luz entre tormenta,
han encontrado lo poco de calor
que en un frió corazón quedaba,
y lo han hecho arder.
divisando ríos congelados.
Por los campos abandonados,
contemplando pequeñas flores.
Por montones de corazones que he andado,
alguno incluso he escuchado latir.
Por miles de sonrisas que he dibujado,
alguna incluso se contagio a la mía.
Por miles de personas que he conocido,
sólo unas cuantas, que no son pocas,
han mirado más allá de unos ojos
vacíos de brillo,
y como fuente de agua en desierto,
rayo de luz entre tormenta,
han encontrado lo poco de calor
que en un frió corazón quedaba,
y lo han hecho arder.
...(Concurso cartas de amor de Barakaldo)
A un corazón que me tiene olvidada:
A ti, que te escondes entre palabras para no arriesgar lo poco que tenemos, a ti, que temes que mi próxima mirada signifique una pregunta que no quieres responder, a ti que me haces llorar cristales en momentos de soledad, y que, sin embargo tus abrazos llenan cualquier vacío que existe dentro de mi corazón.
Y la cobardía adquiere su significado con nosotros, uno huye de cualquier momento que pueda tener algo de amor, y otro, que huye de momentos en los que pueda perder, y no quiero perderte, eso conllevaría abandonar a mi corazón, porque yo te quiero, necesito tus miradas, por frías que sean, necesito tus palabras, por vacías de emoción que estén, necesito tu corazón, por muy lejos que se encuentre del mío. Prometo no cesar en esta lucha, en la que si gano, tú serás mi recompensa, prometo no mentir a mi corazón, no quiero hacerme creer que no siento nada por ti. Ahora lo dejo en tus manos, dejo que en una mano pongas tus ganas de querer, que en algún lado de tu cuerpo dejaste abandonadas, y en la otra, todos los momentos, todos los abrazos, todos nuestros besos, y todo lo que te quiero, no puedo perder.
Momentos
Infinidades de personas buscando momentos,
corazones vacíos, llenos de alcohol,
por mucho que mires no se ven más que cuerpos,
cuerpos sedientos de cuerpos,
vacíos de sentimientos, sólo con ansia de instintos.
Vapor que te invade e impide respirar,
manos que te atrapan para que te unas
a su frío cuerpo latiendo al ritmo de la pasión.
corazones vacíos, llenos de alcohol,
por mucho que mires no se ven más que cuerpos,
cuerpos sedientos de cuerpos,
vacíos de sentimientos, sólo con ansia de instintos.
Vapor que te invade e impide respirar,
manos que te atrapan para que te unas
a su frío cuerpo latiendo al ritmo de la pasión.
corazones
Ella sube su alma al primer tren que pasa,
regala sus recuerdos a cualquier vagabundo necesitado,
sólo mantiene sus fuerzas.
El apaga la luz de su mirada,
abandona a su sonrisa en la estancada,
sólo guarda su esperanza
Dos corazones vacíos que quieren dejar de sentir.
regala sus recuerdos a cualquier vagabundo necesitado,
sólo mantiene sus fuerzas.
El apaga la luz de su mirada,
abandona a su sonrisa en la estancada,
sólo guarda su esperanza
Dos corazones vacíos que quieren dejar de sentir.
frío
esta vez, sólo esta vez,
me guardaré lo que siento,
me morderé la lengua,
aunque muera
con mi propio veneno,
obligaré a mis ojos
a ver sólo
lo que deben ver,
porque si por mi boca
sale lo que mi corazón siente,
esta vez, soltará frías verdades,
frías, porque para mi ya no suponen nada,
pero ahí están guardadas,
frías, porque podrían congelar,
latidos de corazones,
a los que ya poco calor les queda
para latir por fuerza propia.
me guardaré lo que siento,
me morderé la lengua,
aunque muera
con mi propio veneno,
obligaré a mis ojos
a ver sólo
lo que deben ver,
porque si por mi boca
sale lo que mi corazón siente,
esta vez, soltará frías verdades,
frías, porque para mi ya no suponen nada,
pero ahí están guardadas,
frías, porque podrían congelar,
latidos de corazones,
a los que ya poco calor les queda
para latir por fuerza propia.
por favor, sigue latiendo!
y ahora sólo se queda el miedo,
pánico a palabras,
porque me creí como ciega
palabras de corazones mudos,
que no debían haber hablado,
desconfianza a
corazones que me pueden gritar
su verdad,
desconfianza a unirme a sus
fuertes latidos,
no permitiré a mi corazón
encerrarse en jaulas
que construyeron corazones ajenos,
no permitiré a mi corazón,
latir al ritmo de
fríos pensamientos.
pánico a palabras,
porque me creí como ciega
palabras de corazones mudos,
que no debían haber hablado,
desconfianza a
corazones que me pueden gritar
su verdad,
desconfianza a unirme a sus
fuertes latidos,
no permitiré a mi corazón
encerrarse en jaulas
que construyeron corazones ajenos,
no permitiré a mi corazón,
latir al ritmo de
fríos pensamientos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)